Por: Eva Varona
Han transcurrido 65 años desde aquella primera vez que la mujer mexicana ha participado en una contienda federal.
Seis décadas en donde las mujeres han luchado por derechos que hoy día goza una nueva generación que no debe olvidar, que miles de mujeres literalmente pelearon por ese privilegio humano.
Durante todos esos años el rol que desempeña la mujer en México, de cultura altamente machista, ha sufrido diversas metamorfosis.
Desde la política, el deporte, la economía y otras áreas de alta actividad monetaria; son hoy día incluso liderados por mujeres.
La lucha de igualdad de genero y derechos hacia las mujeres se viene intensificando en los últimos años; ya que a pesar de ser parte de una sociedad “igualitaria”, sigue siendo objeto de una terrible violencia por parte de algunos hombres.
En ese tenor debemos tener en claro que la lucha en contra de esa violencia es mucho más notoria y difundida gracias a las nuevas tecnologías; ahora es más visible y por ello más cercana…pero, desafortunadamente la violencia siempre ha estado presente, en los mismos lugares, por los mismos motivos y en los mismos círculos.
En tiempos de COVID conmemorar esta fecha es por supuesto relevante; sin embargo, la pandemia también ha provocado un desbalance sobre el rol de la mujer que poco a poco se había estado disolviendo ante su participación activa en el ámbito laboral.
El índice de madres que trabajan fuera del hogar, se ha disparado exponencialmente…eso, hasta la llegada del Covid.
En estos más de 100 días de confinamiento en nuestro país; todas nuestras vidas y roles dentro de la cotidianidad se afectaron.
Es muy lamentable pero parece ser que toda la lucha que miles de mujeres habrían logrado; han sufrido un enorme retroceso. El índice de violencia se disparó a puntos alarmantes.
El confinamiento reveló una realidad dolorosa en nuestro país; la violencia contra las mujeres y las niñas, ha estado y estará presente en miles de hogares que las obliga a estar en cuarentena con sujetos que las violentan 24 horas al día.
Recuerdo aquella fotografía de una mujer que usando una escalera, ayudada por su vecina, se brincó la barda de 3 metros de su casa con su pequeña hija para escapar de la terrible violencia de la que era objeto por parte de su pareja, que por supuesto, la tenía bajo candado encerrada.
Y así; ante una fecha que se supone hoy debemos festejar desde el confinamiento, existe un rol que se ha comentado en redes sociales por varias mujeres y que aunque parece efímero y hasta superficial, ha sido tema de conversación en los últimos meses.
El rol de ama de casa.
Para varias mujeres resulta frustrante que durante este confinamiento, a pesar de hacer el famoso home office, al final del día terminan irremediablemente siendo amas de casa.
Esto revela que en algún punto de esta lucha encarnizada por la liberación femenina; el rol de ama de casa pasó a ser un símbolo de enorme retroceso e impedimento para lograr sus objetivos.
Ser simplemente una ama de casa era tomado como un símbolo de enorme sumisión y sin embargo, parece que al final este rol también se ha sabido adaptar a la evolución tecnológica porque, por ejemplo, son los Vlogs familiares protagonizados por las amas de casa; los contenidos más consumidos en Youtube.
Lo cierto es que ahora podemos ver que ese rol se encuentra presente querámoslo o no durante este confinamiento; forma parte de nuestra cotidianidad y no tiene por qué ser un retroceso o una acción dolorosa.
Incluso es un rol que puede y debe ser desempeñado por todos los miembros de la familia.
Después de esta pandemia podemos tener la oportunidad de establecer y conciliar nuevos roles dentro de nuestra cotidianidad; ser más empáticos con las tareas hogareñas y quienes las desempeñan.
Después de todo…algún día alguien tendrá que lavar los trastes. :P
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