Por Antonio Trujillo y Perdomo
Aunque entre mi parentela rompieron los cochinitos de barro, pusieron lo que les tocó de pirámide y de telarañas y redes de la abundancia, llevaron al Monte los microndas y las mini pantallas que les dieron por el cambio analógico de la tele y entregaron una lanilla a mi primo El Buchón pa´ que me liberaran ( y que se pela con la marmaja el bato se juyó de drimer pal gabacho); los batos que me tenían privado ilícitamente de mi libertá ya no me soportaron la hediondez, mejor se hicieron majes, como que se les olvidó, dejaron la puerta entreabierta ¡y que me escapo pus qué!. Eran maletillas de coloña, no eran profesionales como los que se llevaron a Harp Helú, a Diego Fernández de Cevallos o a don Fer Gutiérrez Barrios, aquellos era profesionales. Y que conste que no soy apologista de la violencia, crimen ni chamba que se le parezca.
Mi mafilia pagó ¡pero pa´que no me soltaran los bárbaros! Pero pos ni modus, viv le libegté, ajúaaaa.
De lo que casi no me gustó es que me rebuscaron con inusitado tesón, allí donde me hace remolino el cuerpo, quesque buscando un chip localizador. Primero pensé que cuidaban mi salú y me estaban haciendo un etsamen de próstata; aunque era un dedo muy raro -como sin uña- ¿sería pa´no causarme trauma?, en fin que la libré, solo por hoy. Era una banda de delincuentes chafas, como la mayoría de las que andan calentando la plaza veracruzana, parece que contratados pa´desprestigiar al gobierno del Miyuli y la chamba del Yimi Téllez en SSP.
Y neta del planeta que la mala onda de la matancera veracruzana que toca al ritmo reguetón es lo que el señor autoridá ha verbeao, neta, son ajustes entre esas banditas –que por cierto siempre andan hasta el queque de drogas, bien estúpidos-, son malillos ninis y muchos apenas aprendices y émulos de la basura social inspiradora de cancionzetas y narconovelillas
colombianas entre plebes que reproducen las telesmexicanas, ufffffff, un enorme hedor.
Las gentes chambiadoras y de bien pos simón que se apanican cuando de sopapo se trompiezan con los fiambres despellejados y en cachitos, parecen picadillo pa´los tamales de la Calendaria que dejan regaos por todos lados, con la estúpida idea que los otros sus contrarios se van a espantar y se irán huyendo pa´Mérida.
Los que se relamen los bigotes con las matanzas de mañosos, son algunos textoservidores y medios aplaudidores del pasado pluscuanperfecto y que no les han echado ni un lazo, hasta parece que se convirtieron de “analistas e informadores” en simples planas rojas y policiacas, juar juar juar, magnifican a lo cara de perro tochas las fotos, notas y cartelones que les dejan clavados a los fiambres, pa´espantar y neta que están contribuyendo al terrorismo y a la apología de la violencia, ¿no que mucha ética, quesque muy estudiados y de alta moral? ¡Mis polainas! más juar juar juar.
Mientras la mayoría de la gente honesta no se meta en broncas no tiene por qué temer, sin embargo otra neta es que algunos sin deberla son víctimas de esos jijos del demonio. Ahí sí duele al pueblo, pero luego la tira, el Eje, la Armada los apañan o se dan un entre y les dan pa´bajo. Y muerto el animal tiene que acabarse la rabia, allá se lo aigan.
Yo creo que muchos de los 8 millones de veracruzanos tiene presente en su memoria quiénes dejaron el portón abierto pa´que entraran los primeros mafiosos gruesos a Veracruz, o ¿ya no lo recuerdan? Un dato: a uno le dieron 12 millones de dólares para su campaña tricolor, según la confesión de un rajao en una Corte de Tejas, Yunais Estéis. Y otro le dio 500 millones a un candidato valedor suyo y otros 500 millones a un contrario, con tal de que jalaran votos en 2016 y perjudicaran al choleño que hoy es goberneytor. Pero se la pellizcaron, no pudieron detenerlo y ái ta´ chambiando chido el de los labios chenchuales y hondas ojeras.
De los que abrieron el portón uno anda escondido por los rincones como la muñeca fea temeroso que alguien lo vea, y el otro está en el tambo pagando pequeñas culpas y mereciendo abundancia –pero de años en chirona-. Los que recibieron la lana; bien, gracias.
La versión perversa de los cafetómanos güevosfrios por la que andan tirando tanto fiambre en las esquinas y lotes baldíos es para que la sociedá se espante, repulse, repruebe y eche cacayacas contra el gobierno panperredista quesque por tanta inseguridá (argumento de precampaña). Los cafeteros deducen que hay una manopla manchada de talco que está meciendo la cuna muy agitadamente, porque tienen terror que los dos azules años de pamperredismo se extienda a ¡ocho años! Y pos con ese resultado ya bailaron Bertha los tricolores que todavía están en espera pa´que les den pa´dentro en la cárcel de Pacho Viejo y anexas.
Lo que no deja de ser cierto es que las “legiones de idiotas de las redes” (Umberto Eco, dixit) junto con desestabilizadores profesionales –dicen que hasta rusos-, y terroristas cibernéticos domésticos sueltan cada vez que pueden mensajitos mamucones de que habrá leva, levantones, razias, atarrayazos, después de las 10 de noche en las principales ciudades de Veracruz, que nadien salga pa´fueras de sus chantes porque se los cargaría el payaso, quesque porque se andan buscando entre ellos para comérselos vivos y sin sal; lo que intentan es sembrar terror entre la raza y desprestigiar al gobierno estatal y a las fuerzas federales quienes están haciendo sus chambas reforzando con más elementos. Esa es la neta y allá se lo aigan los que crean los chismes.
El que nada debe, nada teme. Aunque tampoco le jalen las barbas al chamucho, y mejor acójansen en su camita temprano, mañana será otro día.
No estaba yo pelucas, andaba embarrascao. Chaííítoooo beibiiisssssss.
GUIJARRO: Humberto Alonso Morelli el nuevo alcalde boqueño es de los que arrancan sus administraciones de manera tersa y sin
contratiempos. Recibió toda la maquinaria andando y bien aceitadita, ¡cuál sufrir!.
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