EL HARTAZGO CIUDADANO
Por: Mtra. Salma Mújica Zavala
El amor por los partidos políticos y sus tradicionales métodos de conquista del voto se encuentra en crisis simultánea con el sistema de gobierno mexicano. La relación del quehacer político con la democracia se extinguió en los gobiernos de derecha del PAN-PRI y los efectos se están dejando sentir abriendo camino a las expresiones de izquierda.
Lo cierto es que la sociedad ya no aguanta más, desde el más rico hasta el más pobre, para muestra la guerra mediática que se libra en las redes sociales, donde el contenido está desbordado por la violencia, evidenciando a gobernantes rebasados por la pérdida de autoridad moral que representa la incapacidad para domar el caballo de la corrupción, la impunidad y ahogado por aquellos políticos que viven en la costumbre de que solo importan ellos mismos y el botín que representa el presupuesto público.
Visto en esta perspectiva, da la impresión que la contienda electoral se tiene que entender con un candidato pre-Internet que ha sabido conectar inundando de publicidad anti PRI, mostrándose relajado ante comentarios en su contra y conectando con los jóvenes con frases como el "Ya sabes quién": Andrés Manuel López Obrador (AMLO); un aspirante de la era Instagram, Facebook y Twitter que, en dos polos opuestos muestra una faceta de comunicarse con el mundo en idiomas y mostrar humildad con las culturas indígenas, por otro el lujo y la ostentosidad de su fortuna como lo han exhibido en múltiples ocasiones: Ricardo Anaya, y, en medio, un ex funcionario que, si bien está presente en Internet, es ajeno a lo que significa el uso político de la Red, pues es el menos visto de todos, José Antonio Meade.
Presidencial y gubernatura a la cargada.
Las campañas avanzan y con ello se muestran las verdaderas caras de la moneda rumbo al proceso electoral próximo, no hay rival pequeño y tampoco hegemonía de un sólo color como se pensó..
La era del PRI con Duarte terminó, pero con ello también la gente despertó y ahora sabe votar, el movimiento de multitudes de masas para eventos y las viejas técnicas populistas para retener al sufragista en la preferencia hasta el día de la elección como las bien conocidas dádivas, se someten a la prueba de fuego de la conciencia y el razonamiento del voto cuando tienen la boleta electoral enfrente.
Cuitlahuac García y Yunes Márquez los encarrerados por la de 6 años, seguidos por Pepé Yunes, van en su línea de campaña pero con una dependencia total de los resultados que tengan los candidatos presidenciales el próximo julio, y es que todas las previciones indican que quien gane Veracruz para la presidencia de la república gana en automatico la gubernatura, salvo que otro juego en la mesa pase.
Todo esto cual si fuera menos marca un panorama de una sola cargada lo cual ha vinculado cada vez más las preferencias de los gubernamentales con los presidenciables. Mientras tanto, las pre-campañas presidenciales se terminan con un marcador AMLO muy por encima de Anaya y en un 2 a 1 con Meade, la lectura es evidente el que pega primero pega mejor.
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