ENTRE GRIPA Y DENGUE

Cuando las piedras hablan

Por: Eva Varona

9 oct 2019

Después de unos días de ausencia mis queridos amigos, les saludo desde mi tierra Xalapeña cuna Veracruzana y muy desafortunadamente en estos momentos foco rojo con el deshonroso primer lugar en contagios de Dengue.

De entrada sí; estuve enferma y con el Jesús en la boca, deseando que no fuera dengue y con la fortuna de que sólo fue una gripa algo molesta de varios y moquientos días.

Pero el miedo ronda a esta enfermedad, que aunque no es contagiosa de ser humano a humano sino como ya bien conocemos es transmitido por la picadura de un maldito mosquito; tiende a confundirse con la gripa porque algunos síntomas son parecidos como el intenso dolor en articulaciones, fiebre y mareos.

Pues le comento que expresar en mis redes que andaba miedosa de que fuera Dengue; grande fue mi sorpresa al ver varios comentarios de amigos de esta ciudad y zonas aledañas me comentaron que hay muchos enfermos cercanos a ellos, algunos siendo maestros me dijeron que tenían alumnos faltantes por padecer los síntomas.

Es la realidad amigos; los datos oficiales no mienten:

Este año se han registrado 4,992 personas más con esta enfermedad.

El fin de semana se dio a conocer que el arzobispo de Xalapa, Hipólito Reyes Larios, fue hospitalizado de emergencia por esta enfermedad.

En algún momento se llegaron a confirmar de mil nuevos casos de dengue en ¡tan solo una semana!

Los municipios con más casos registrados son Chicontepec, Tempoal, Rafael Delgado y Jilotepec, así como una alta incidencia de la enfermedad en Xalapa.

¿Pero por qué demonios llegamos a estas alturas?

Pues verán ustedes mis queridos lectores que esta historia de terror comenzó con un sentimiento puro, honesto y de buena entraña en donde la cuarta transformación con todo y su austeridad franciscana llegó a este estado, dando por concluido programas y acciones que consideraron un derroche innecesario de dinero, como la “inútil compra” y posterior fumigación del larvicida que mataba la cría del mosco transmisor del dengue.

La temeraria acción se justificó como una campaña para proteger a las abejas, que a decir de las autoridades eran la prioridad.

El caso es que todo esto les salió el tiro por la culata, muy parecido a aquella estupidísima acción del gobierno federal por no volver a contratar brigadas contra incendios forestales por considerarlas un derroche innecesario y ya sabemos el daño irreparable que ocasionó en varias partes del país esta medida de austeridad franciscana.

¿Cuál es la realidad?

La realidad es que ahora el gobierno estatal está apuradísimo fumigando por todas partes, porque se le viene encima su primer informe de gobierno, donde se auguran barruntos de tempestad política; por supuesto hay más taches en su lista que palomitas, a eso habría que cargarles todas las cruces de víctimas de la delincuencia que ni con las súper patrullas que presumía al inicio de su mandato ni la guardia nacional han podido controlar.

Y hoy los medios le informan que  cargará dos cruces más:

“Una joven estudiante de medicina, así como un niño de escasos cinco años, fallecieron el sábado en el Hospital Regional de Río Blanco, presuntamente a causas derivadas de la enfermedad del dengue.
Se trató de una estudiante de la Facultad de Medicina de la Universidad Veracruzana, quien falleció del dengue tipo grave, a pesar del esfuerzo que hicieron los médicos especialistas.
El segundo caso tuvo lugar en el mismo hospital, donde perdió la vida un niño de tan solo cinco años de edad, sumando con ello el segundo caso en menos de 24 horas en la región centro del estado.
El infante en vida respondía al nombre de José Emmanuel V. B., de cinco años con domicilio en el Barrio de San José perteneciente al municipio de Coscomatepec.
De acuerdo al reporte policial, el menor falleció este sábado cinco de octubre, presuntamente a causa de dengue clásico, a quien los médicos le detectaron dos estereotipos positivos y derivado a la intensa fiebre que presentó, convulsionó hasta perder la vida de un edema cerebral.”