viernes, 5 de octubre de 2018

Danzas, indumentarias y bufones sagrados, en el XIV Foro Internacional de Música Tradicional



*** Durante el acto inaugural, Diego Prieto Hernández, titular del INAH, señaló que el
encuentro académico acredita la diversidad y pluriculturalidad de nuestro país
*** El programa comprende la entrega de dos Diplomas al Mérito, ocho presentaciones
dancísticas, tres conferencias magistrales y 43 ponencias

Los ritmos y la ritualidad inmersa en las diversas danzas de México, así como la
identificación, preservación y rescate de géneros musicales como el “canto cuamilero”,
son abordados en el XIV Foro Internacional de Música Tradicional, que se desarrolla del
4 al 6 de octubre en el Museo Nacional de Antropología (MNA), como parte de la XXIX
Feria Internacional del Libro de Antropología e Historia (FILAH).
Al inaugurar el evento, Diego Prieto Hernández, director general del Instituto
Nacional de Antropología e Historia (INAH), destacó la importancia que durante 14 años
ha tenido este encuentro académico y musical, el cual acredita la diversidad y
pluriculturalidad de nuestro país.

“Las músicas y danzas tradicionales en México constituyen la confluencia de
diversos patrimonios culturales, esto se hace evidente no sólo en los ritmos y estilos, en
las instrumentaciones y los personajes, sino en majestuosos atuendos que portan sus
intérpretes, como aquí los xhitas de Temascalcingo”, expresó.
Acompañado de Adriana Konzevik, coordinadora nacional de Difusión del INAH,
el antropólogo señaló que personajes como los viejos mascareros de Temascalcingo,
evidencian en los universos otomíes (ñätho ñähñu) y mazahuas (jñatjo) la presencia e
importancia que tienen los sabios y ancestros.
“En las danzas rituales, la figura de estos personajes que pueden resultar
grotescos, burlones o antisolemnes es fundamental, ya que la mirada indígena sobre el
bien y el mal no necesariamente es excluyente como la occidental, sino es una
complementación entre orden y desorden, dioses y diablos, día y noche, cielo e
www.inah.gob.mx
inframundo. En la fiesta hay alegría y reencuentros, en ella se resuelven diferencias o
se acentúan, así es la lógica celebratoria de nuestros pueblos”, expresó.
Benjamín Muratalla, subdirector de la Fonoteca del INAH y coordinador del foro,
comentó que el encuentro es una oportunidad para que músicos, danzantes,
académicos y público en general establezcan diálogo entre sí, en el que haya debates,
acuerdos y se observe la manera en que las comunidades originarias entienden el
universo.
Las actividades del evento académico iniciaron con la entrega del Diploma al
Mérito que el INAH otorgó a don Fidencio Magdaleno Contreras Narciza, danzante y
confeccionador de indumentaria tradicional para la Danza de los xhitas, de
Temascalcingo, en Estado de México.
Contreras Narciza se ha distinguido como artesano desde los 12 años de edad y
no sólo fabrica las máscaras para la Danza de los xhitas o Viejos de Corpus, bajo la
técnica de tallado en tronco de maguey y barbas de fibras vegetales como el ixtle, sino
que también sabe preparar la bebida “charape”, que se ingiere durante la ejecución de
dicha danza, y consiste en una mezcla de cebada, piloncillo, canela, anís y pulque.
Posteriormente, Thu’bini Mäst’oho, profesor de lengua hñähñu, expuso que la
Danza de los xhitas se remonta a la época prehispánica. Según los relatos de la gente
mayor, dijo, a partir de una fuerte sequía, los antiguos ñätho ñähñu y jñatjo pidieron
a sus deidades el regreso de las lluvias y que trajeran consigo buenas cosechas. Con la
Conquista española este rito agrícola indígena se fusionó con la festividad cristiana de
Corpus Christi, y anteriormente se realizaba en el cerro del Tengatxa o “juego de
viejos”, de la comunidad de Temascalcingo.

“El primer jueves de junio, cientos de personas salen a danzar por las calles de
Temascalcingo con sus máscaras de viejos, bastones, trajes típicos creados de ixtle,
manta o cartón, y llevan consigo cargamentos, como jarros, leños, cazuelas y maletas
de semillas, con el objetivo de rendir culto a su santo patrono, el Señor de la
Coronación”, puntualizó.
Explicó que en la danza hay dos elementos principales: “El viejo mayor” y “La
vieja mayor”, quienes son seguidos por los hijos y la familia. También existe un “torito”
(hecho de madera y cuero, cargado por un personaje) que representa el mal y aludía a
los conquistadores españoles y posteriormente a los hacendados revolucionarios;
mientras que los “viejitos” (pobladores ñätho ñähñu y jñatjo), simbolizan el bien.
El 6 de octubre, también se hará entrega del Diploma al Mérito al señor Eleazar
Íñiguez Sandoval, músico de la comunidad de Canichal, municipio de Mexticacán,
Jalisco, uno de los pocos intérpretes de canto cuamilero.

El género cuamilero, explicó Benjamín Muratalla, es un canto llano poco
escuchado que practican los rancheros que cultivan la tierra áspera y pedregosa en la
región Caxcana —que comprende el sur de Zacatecas y la colindancia con Jalisco—;
se practica al momento de realizar las faenas agrícolas y alude a temas como la milpa,
paisaje, lluvia, siembra o el amor.
www.inah.gob.mx
El XIV Foro Internacional de Música Tradicional tendrá ocho presentaciones
dancísticas: La Danza de los xhitas, de Temascalcingo, Edomex; Danza de los
payasos, de Mazatecochco, Tlaxcala; y Canto de la muñeca y Danza de la culebra, de
San Francisco Papalotla, Tlaxcala, que se realizaron este 4 de octubre.
En tanto, el viernes 5 se presenta la Cuadrilla de Xantolo de Itzocal, Atlapexco,
Hidalgo; la Orquesta Antología Yoloxóchitl —acompañada de la comparsa de
danzantes Los Calaveras— presentará parte del Carnaval de Chimalhuacán, Edomex.
El último día estarán la cuadrilla de danza del municipio de Arteaga, Michoacán;
Carnaval de Martín Carrera, Ciudad de México, con la Banda Hermanos Rocha; el
evento concluye con el Carnaval de Zacualpan, Veracruz, amenizado con música de la
banda Estrella de Oro.

Benjamín Muratalla señaló que en esta edición del foro se dio importancia a las
comparsas de carnaval donde existe la presencia de “bufones”, personajes que tienen
un trasfondo antropológico-ancestral, que en el rito tienen la función de transgredir el
orden social y son concebidos como chamanes o sacerdotes.
Durante los tres días del evento habrá una conferencia magistral, a las 19:00
horas. El día 4, Miriam Huberman, investigadora y docente independiente, habló sobre
los estudios antropológicos que ha realizado en torno al movimiento corporal y
coreografías; al día siguiente, Alejandro Martínez de la Rosa y Rubén Ramírez Arellano
disertarán sobre las danzas de los pascola y del tecuán, respectivamente; y finalizará
con la ponencia de Jesús Jáuregui, investigador de la Fonoteca del INAH, sobre los
mariachis, danzas de arco, alabados y judíos, en Huaynamota, Nayarit.
También, el 5 de octubre, Luis Eduardo Bautista, maestro en danza de la Casa
de Cultura de Huajuapan de León, Oaxaca, dictará la ponencia La danza de los
chareos y chilolos de Santiago Juxtlahuaca, Oaxaca, en la que pondrá en controversia
si esta representación simboliza la lucha entre moros contra cristianos o ricos contra
pobres.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

GRACIAS POR DEJAR TU COMENTARIO.